Muchos especialistas vieron juego sucio en esta acción, dado el reconocimiento que tenía el portero argentino en los penales, siendo uno de los especialistas en la materia. Las decisiones arbitrales, correctas o incorrectas, como siempre, fueron un tema de las discusiones; como por ejemplo las tres tarjetas amarillas mostradas al jugador de Croacia Josip Šimunić por el árbitro Graham Poll en el último partido de la fase de grupos ante la selección australiana que acabaría empatado a 2 goles; el mal arbitraje del eslovaco Lubos Michel fue tema de acaloradas discusiones, sobre todo desde el lado albiceleste, en el partido de cuartos de final Alemania contra Argentina.