maradona con la camiseta de mexico

Su historia se remonta a 1938 cuando Alfredo «Papay» Holguín, alumno muy entusiasta a la hora de arengar a sus compañeros, vio que justamente el equipo incaico iba perdiendo 2-0, ante el Universitario del Cusco y para dar ánimos al club, Holguín completo una frase que se venía cantando durante el partido: «Upa, upa, upapá.. el Cienciano es el Papá».