En 1986, Dinamarca sorprendió con su ropa y su fútbol. Dinamarca y la marca Hummel van en tono monocromático: rojo de local, blanco de visita. Como nos tiene acostumbrados, la marca de Oregon apostó a una imagen clásica, minimalista y retro. El objetivo del juego era hacer pasar una pelota entre dos postes verticales y por debajo de una cinta que los unía, camiseta de francia y el equipo que marcaba más goles era el ganador.